Cuando me respondéis, me quedo atónita, porque no os conozco. Cuando hablo para vosotros no me escucháis. Igual que los prisioneros de la Caverna confundo vuestras sombras en el exterior desde el fondo del túnel y maquino una realidad que solo en mi pensamiento existe.
Twitter nos ofrece un mundo hipermaleable, propio y público al mismo tiempo. Parecido al mundo del poeta con sus personajes y fantasías, una forma más suave de reconfortante aislamiento, remix moderno de imaginación con retazos de realidad.
Personalidades a la carta. Mundos únicos a la carta, con hechizantes gotas del morbo de lo real. Engañoso. Uno cree que habla, pero no habla, escribe. Cree que escribe y habla. Cree que está solo y no lo está. Y cuando cree que está con otros es cuando más engañado se encuentra en las profundidades oscuras de la caverna.
Este post fué publicado hace unos años en otro blog ya desparecido.
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